Versalles: Rumba y revolución en el corazón de Matanzas

Imagen tomada de lajovencuba.wordpress.com 

Curiosidades de la historia, la toponimia de este populoso y pintoresco barrio ubicado al norte del Yumurí recuerda al viajero los orígenes aristocráticos con que las clases acomodadas de principios y mediados del siglo XIX, descendientes de colonizadores franceses que pocas décadas antes huían de la revolución antiesclavista de Haití, evocaban así la antigua residencia de la monarquía gala en París. El Versalles de Matanzas, en cambio, es también la historia de las llamadas cofradías o cabildos afrocubanos, formadas por antiguos esclavos libertos que darían lugar a uno de los géneros musicales más afamados de todos los tiempos, la rumba, por allá por los alrededores de 1890, escasos años después de la abolición de la esclavitud (1886). Idéntico enclave en el que, más de medio siglo más tarde, tendrían lugar las luchas de las clases obreras y populares, en su afán por prestar una importante ayuda para derrocar la tiranía batistiana y construir la naciente sociedad revolucionaria.

En nuestra visita podremos observar los efectos del desarrollo urbanístico propio de la época dorada del comercio del azúcar, con las primeras parcelaciones formadas por casas nobles construidas en el entorno del Cuartel de Santa Cristina, que después de la revolución se convierte en Centro Escolar Mártires de Goicuría, en un proceso similar al de Ciudad Escolar Libertad de La Habana.

Nos interesaremos por los orígenes y desarrollo actual de lo que el gran antropólogo cultural Fernando Ortiz haría fortuna en llamar “Las cuatro culturas indias de Cuba”, redefiniendo de esta forma el proceso de formación histórica de la nacionalidad cubana sobre la base de la “transculturación”. Actualmente varios cabildos siguen funcionando en Matanzas y hace ya tiempo que estas asociaciones comenzaron a revalorizar su excepcional cultura africana, poniendo de relieve su riqueza y evolución a través de sus característicos ritos sagrados y del ritmo de sus tambores, el de los Iucumís de Versalles y de otros cabildos nacidos en los barrios marineros de Matanzas y La Habana.

Asimismo pasearemos por un emplazamiento que se convirtió en uno de los centros de la lucha insurreccional contra la dictadura militar de Batista. Su tradición combativa cristaliza en la década de 1950, mediante acciones varias como sabotajes que facilitaron el desembarco del Granma y el apoyo a la huelga general del 9 de abril de 1958, poco antes del triunfo de la revolución, luchas originadas en esta zona obrera que toma en la época el nombre de Reparto Dubrocq, en referencia a los terrenos propiedad del acaudalado criollo Miguel Dubrocq durante el siglo anterior.