Un viaje especial

Gentes de Cuba paseando por el corazón de La Habana Vieja

La impresión de un turista extranjero en su viaje a la Isla, en plena conversación con un cubano que le explica las dificultades de la vida diaria y critica abiertamente al gobierno de su país, es que esta persona está en contra del "régimen" socialista. Cuando visitamos cualquier otro país extranjero no ocurre lo mismo, de hecho probablemente no nos pase por la cabeza hablar de política, incluso a nadie se le ocurre pensar que las críticas del vecino del barrio a las medidas de nuestro propio gobierno signifique que el interlocutor se haya posicionado contra el "sistema democrático" capitalista.

La avalancha de información negativa que tan a menudo y de forma persistente nos llega desde los medios de comunicación más potentes económicamente sobre Cuba es motivo suficiente para que el viajero se interese, por un lado, en buscar puntos de vista alternativos sobre la cuestión a través de lecturas o diferentes canales informativos disponibles en la red y para, por encima de todo, viajar con la mente muy abierta y con una conciencia muy clara de la carga psicológica inducida que llevamos encima de los hombros, quien escribe el artículo incluido a pesar de su franco posicionamiento en favor del modelo político, económico, social y cultural legado por la historia de la revolución cubana.

Estamos convencidos de que el viajero se sorprenderá del carácter abierto, amistoso y servicial de los cubanos, "como todos los pueblos" me decía recientemente un compañero de la Isla caribeña. Nosotros creemos que, quizás en este caso, un poquito más.